ESE ROSTRO

En el fondo de mi alma lo he instalado

como transparente y nítido espejo,

para transmitirme siempre el reflejo

de ese tu rostro por mí tan amado.

 

Nuestras miradas bien se han aclopado

y en mi interior con amor las protejo

aunque fuera ese rostro se haga viejo

nunca por mí será él abandonado.

 

Así, siempre presente yo lo tengo,

porque en el alma su imagen presa está

y con mi cariño el tiempo detengo.

 

De ese rostro nadie extraño dispondrá

porque tan sólo en mi interior retengo

y romper su reflejo, nadie podrá.

 

© J.E.C.L.  16-3-2007

 

(VER POEMA EN IMAGEN)